Por suerte, vivo en una ciudad donde siempre luce el sol, los días son largos y luminosos y es imposible dirigir la vista al cielo sin hacer uso de las gafas de sol, pero desde hace algún tiempo no sabría decir cuanto… algo ha cambiado.
El cielo esta nublado, y cada paso me encuentro momentos grises y tristes.
La luz, que en ocasiones se aprecia, se ve tenue y temblorosa, como la de una vela, y así creo que me siento yo. Pequeñita, frágil, y temblorosa, tenue y débil…y muy, muy asustada.
Me da miedo la oscuridad, me da miedo el dolor, la soledad, el ruido, la gente, el querer y no poder, el abandono, el amor, me da miedo no llegar, no ser. Me da miedo cansarme de esperar, no volver a nacer, estirar demasiado el hilo, no subir a lo más alto o incluso hacerlo y caerme una vez arriba…
Cuando el cielo esta nublado, me nublo yo también y todo son dudas, y me encuentro con fantasmas del pasado, que irremediablemente vuelven a formar parte del presente.
DESDE AYER VALENCIA TAMBIEN ESTA EN ALERTA ROJA POR FUERTES LLUVIAS!!!
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